Fuera de mi habitaci n y no m s lejos de la primera peatonal de mi barrio, camina gente rota intentando sanar sus heridas con otros que est n m s rotos y m s vac os; va el que se enamora de la mujer que ya tiene novio, la que sufre porque su pareja no la llama o no le escribe. La celosa, el posesivo, la traicionera, el que a todas le habla bonito, la que no sabe lo que quiere, el solo busca perfiles de mujeres guapas para caerles ... fuera de esta habitaci n el mundo se consume entre s , se miente y se enga a, se rompe sin raz n, se ilusionan y despu s se destruyen, se enamoran y al mes o menos tiempo se bloquean y se odian con el alma. Es ir nico, pero son pocas las personas que se toman su tiempo para ver esta realidad y aceptarse en su soledad viendo en ella una oportunidad nica para crecer, queri ndose y am ndose a pesar que la persona correcta tome su tiempo en llegar, cuidando su presente de no m s pasados t xicos, so ando y haciendo realidad sus propias metas sin importar si hay alguien o si no. Son pocas las personas que hoy por hoy tienen determinaci n y primero eval an lo que quieren y en especial cu ndo y con qui n realmente deben estar. . . esos son los que hoy viajan, disfrutan, la pasan entre amigos, los que cantan, los que escriben, los que se grad an y cambian el rumbo de sus vidas, los que disfrutan una pel cula o van al gym y no les importa si dejan en su casa el celular ... pero los otros, los otros solo juegan a encontrase en un mundo donde ni siquiera ellos mismos saben que est n.