La obra se divide en ocho etapas que van en crescendo transformando a Marta. Los temas varían según la autora va buscando y encontrando dentro de sí misma. La lucha es interior y el relato es en tercera persona.

Aunque toca varios temas, todos nacen de relaciones entre padres e hijos. La maldad y la bondad del ser humano chocan entre sí y son los sentimientos que manejan la vida de los personajes. La metamorfosis de Marta se hace posible por su profunda convicción de la existencia de Dios.

El canto de la cigarra, es el preludio de una hermosa canción.