Aspectos diferenciales de la adivinación.Para los mayomberos, el universo o "Nfinda" es objeto de gran interés, tal como he afirmado en otras publicaciones, la "Nfinda" (trad. Monte) equivale a todo lo existente ya sea de naturaleza visible o invisible. No obstante, lo verdaderamente importante en este caso, es que los mayomberos no conciben la "Nfinda" como un mundo fijo, frío y mudo; sino que por el contrario, está concebida como un mundo en continuo movimiento vital cargado de significaciones, y portador de mensajes, es decir, "habla", por lo cual la Regla de Palo Monte en su doctrina considera la "Nfinda" como una Entidad "dotada" de "Personalidad-Mágica" polifacética al poseer nombre, historia y función.En la "Nfinda" todo lo existente tiene una "historia" un "nombre" y una "utilidad o función" aunque desconozcamos una o varias de estas características son requisitos imprescindibles para poseer Personalidad-Mágica, rasgo que facilita que el mayombero pueda emprender mediante el rito adivinatorio una comunicación bidireccional con cualquier Ente que habite dentro de la "Nfinda" o con la "Nfinda" misma.Esta condición inherente de todo lo visible e invisible que habita en la "Nfinda" se vincula en una especie de "Vida Participada" que a mi modo de entender es un ciclo continuo e inagotable de relación entre los Seres visibles e invisibles, ambos impregnados de "espiritualidad", existencia dual, sinergia y vida que sostienen y resume la "Personalidad-Mágica" y el Principio de manipulación de la Fuerza que apuntalar el mayombe como religión. El mayombero, quien es el que en definitiva le otorga la "potestad" y es capar de manipular con sus artes de hechicera la "Nfinda" puede entablar un dialogo con el Mundo-Invisible, mediante la utilización de elementos visibles "capacitados" para este fin, como pueden ser, caracoles, huesos, piedras y un sinfín de objetos rituales que abarcan un universo prácticamente incontable.En el Palo Monte Mayombe, la persona que ejerce la adivinación, esto es, el adivino, recibe indistintamente los siguientes nombres: "Súdika-mámbi", "kindamba-kuseka", "kusambulero", "nganga-ngombo" o "nganga-mpiata", términos todos que deben traducirse como "el adivino". No obstante, en el caso de "nganga-ngombo" y de "nganga-mpiata", pueden tener otra acepción: "médium de trance"; es decir, la persona que cae "poseído" por los espíritus.En este contexto, "intérprete" o "adivino" es aquel que posee el código que le permite descifrar las diversas